El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, informó que diseña una estrategia contra la deportación de migrantes que sufrieron abusos médicos en el centro de detención migratoria de Irwin, Georgia, Estados Unidos.
Además, continúa con el seguimiento permanente a los casos de las mexicanas que se encuentran en dicho centro donde presuntamente sufrieron abusos médicos y dijo que ninguna de las mujeres afectadas ha sido deportada a México desde que se dio a conocer el caso.
Explicó que durante la visita más reciente, el 10 de noviembre, funcionarios consulares entrevistaron a cuatro mujeres mexicanas que permanecen en el centro.