La joven Cassidy Stay declaró ante un juzgado de Texas, cómo presenció la masacre que cobró la vida de sus padres y cuatro hermanos a manos de su tío Ron Haskell.
Stay, quien en el momento del asesinato de su familia tenía 15 años, relató que su tío había entrando a su hogar el pasado 9 julio del 2014. Portaba una pistola y ordenó a sus hermanos que esperaran.
“Yo estaba tratando de apelar a su humanidad. No pensé que alguien lastimaría a los niños si supiera sus nombres y cuántos años tenían“, indicó la joven sobre su tío.
Una vez que Katie y Stephen, padres de Cassidy, llegaron a casa, Haskell empezó a matar a toda la familia; ordenó a los niños que entraran a la sala, los amarró, los tiró al suelo boca abajo y les disparó uno a uno en la cabeza.
Cassidy recibió un balazo, pero éste le rozó su cráneo, resultando herida, logrando sobrevivir al fingir que estaba muerta.
“La habitación olía a sangre. Sabía agria. Se sentía pesada y caliente. No había espíritu en esa habitación“, recordó Cassidy, durante el testimonio en el juzgado.
El tío Ron Haskell podría enfrentar la pena de muerte en caso de ser declarado culpable.