Desde hace varios años las instalaciones de Pemex en el Golfo de México son acechada por grupos dedicados al robo y tráfico de combustible, ya que desde el 2017 se tienen contabilizados alrededor de 300 reportes de robo de hidrocarburos en buques petroleros y sustracción de materia y equipo de diversas plataformas de Petróleos Mexicanos.
La intercepción de los buques petroleros en aguas mexicanas, los abordan, después someten a la tripulación, mientras conectan mangueras de su embarcación para así extraer el producto, de acuerdo con las autoridades navales.
En el sexenio anterior, personal naval aseguró cuatro buques que traficaban combustible en altamar, en los estados de Campeche, Tabasco y Veracruz, los navíos Havnor que transportaban ilegalmente 395 mil 343 litros; Capitán Kenny, con 395 mil 343 litros; Isla del Carmen, con 291 mil 971.11 litros, y Perla con 5 mil 678 litros.
Los tripulantes de los barcos mencionaron que los delincuentes son de nacionalidad hondureña y colombiana, quienes no reportan en el Diario de navegación el combustible que se llevan a diferentes destinos.
La Marina reforzó la vigilancia marítima en el golfo de México con la utilización de helicópteros, patrullas oceánicas e interceptoras ante la situación, para detectar a los grupos delictivos que operan en la región petrolífera del país.