Las autoridades israelíes buscan inculpar a la reconocida modelo Bar Rafaeli por presunto fraude fiscal y a sus padres por blanqueo de capitales, de acuerdo con un comunicado oficial publicado el día de hoy por el Ministerio de Justicia.

Rafaeli de 33 años, es sospechosa de no haber declarado sus ingresos en el extranjero durante los años 2009 y 2012, los cuales ascienden a un total de 23 millones de séquelles (6,16 millones de dólares), de acuerdo a Ministerio.

Por otro lado, sus padres Tzipi y Rafi Rafaeli, podrían haber realizado un presunto lavado de dinero y por tal motivo, al igual que su hija, tendrán que comparecer ante la justicia en dado caso de una inculpación formal.

De acuerdo con las leyes en Israel, los ciudadanos israelíes que viven en el extranjero no están obligados a declarar los ingresos que obtienen en otros países.

Las autoridades acusan a la modelo y a su madre por haber creado una residencia ficticia en el extranjero para realizar el fraude y pagar menos impuestos.

En el año 2015, la modelo ya había sido detenida y liberada bajo los mismos cargos como mentir sobre su residencia fiscal, al haber vivido en apartamentos de lujo que se encontraban registrados a nombre de su madre y hermano.

También es sospechosa de no haber declarado regalos o favores, como el préstamo de pisos lujosos y coches valorados en más de un millón de séquelles (235 mil dólares), de acuerdo con el Ministerio.

En el año 2010, un general israelí pidió a los ciudadanos boicotear los productos publicitados por la modelo quien además se negó a realizar el servicio militar obligatorio.

Recientemente Rafaeli fue seleccionada para animar la ceremonia de Eurovisión de Israel este año.

Redacción/El Nacional