La planta de Colgate-Palmolive en Valencia, suspendió operaciones esta semana debido a la falta de cajas para distribuir su producción de lavaplatos y detergentes líquidos.

El 23 de agosto, el gobierno venezolano tomó el control de la transnacional irlandesa Smurfit Kappa, fabricante de cajas de papel para embalaje que le vendía a Colgate-Palmolive.

El sindicalista Carlos Rodriguez, apuntó que el departamento de ventas de la empresa podría traer las cajas de Colombia, pero eso provocaría un aumento en los precios de los productos.

Con la suspensión de operaciones de la planta de líquidos, solo quedan dos de las cinco plantas de Colgate con operaciones, aunque con limitaciones por falta de materia prima.

La planta de jabones cerró desde el 8 de febrero de 2017, por la regulación de precios por parte del gobierno y la falta de insumos.

Desde hace meses, el gobierno de Nicolás Maduro ha expropiado diversas empresas que habían anunciado la falta de materia prima.

Redacción/El Nacional