Un análisis basado en cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), señala que la violencia contra las mujeres en México persiste en niveles alarmantes, abarcando lo psicológico, físico, sexual y económico.
De acuerdo con el informe publicado esta semana, durante el período de 2016 a 2021 se ha observado un aumento en estos tipos de violencia, con una única disminución registrada en el ámbito económico.
El análisis, titulado “La violencia de género en México se ha mantenido elevada e incluso ha aumentado”, destaca que este incremento implica un mayor nivel de independencia financiera para las mujeres mexicanas.
En términos de prevalencia, la violencia psicológica se sitúa en un 51.6%, la sexual en un 34.7%, y la física también en un 34.7%.
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Destacando algunas entidades con mayor prevalencia, el Estado de México con un 78.7%, la Ciudad de México con un 76.2%, y Querétaro con un 75.2%, sobrepasan el promedio nacional del 70.1%.
El análisis también subraya la necesidad de reformas en el protocolo para denuncias de mujeres, con el objetivo de evitar su revictimización, incluyendo la reinstauración de refugios para víctimas de violencia y leyes que prohíban el matrimonio infantil.
Además, se señala que el porcentaje total de feminicidios en México ha aumentado de un 2.6% en 2015 a un 3.3% el año pasado.
El informe resalta que el 70% de las mujeres en el país ha experimentado situaciones de violencia.
En términos económicos, el análisis sugiere que una reducción en la violencia y la desigualdad de género beneficiaría a la economía, argumentando que empoderar a las mujeres como agentes económicos, políticos y sociales podría influir en las decisiones políticas y aumentar la representatividad de las instituciones.
