Redacción/ El Nacional
Entre Boca Juniors y River Plate no se respira ningún perfume a tregua, pese a que este fin de semana el fútbol argentina tendrá descanso por elecciones primarias en la capital del país.
Boca y River, los equipos más populares de Argentina, se enfrascaron en un cruce verbal por sus tres choques en menos de dos semanas, el primero de ellos el 3 de mayo por la liga doméstica en la que ambos comparten la punta, y los otros dos por los octavos de final de la Copa Libertadores.
Gallardo: “Por las propuestas que muestran River y Boca, van a ser partidos interesantes”.
Por si no alcanzaran los condimentos atractivos que tiene ese duelo, afloraron sales y pimientas. No solo se compite por la liga y la Libertadores: ambos clubes desplegaron defensa y ataque en los escritorios por las fechas de los partidos de la copa y por un tema sensible para ellos como es la designación de los árbitros.
Ni en un Barcelona-Real Madrid se habla tanto de estas cuestiones o se tejen mantos de sospechas como en un Boca-River.
Boca puso el grito en el cielo cuando entendió que por un presunto pedido de River la Conmebol cambiaría la fecha de los duelos coperos previstos para el 6 y 13 de mayo y las llevaría al 7 y 14 de ese mes. La Conmebol oficializaría ese cambio, pero nada tendría que ver River sino la televisión.
“Es de chiquito, muy chiquito, discutir el día de un partido”, subrayó el presidente de River Rodolfo D’Onofrio. “Que nos digan cuando jugamos y donde quieran y nos vamos a presentar”.
Con respecto a los árbitros, entre la dirigencia de ambos clubes también se generaron polémicas porque los que son del gusto de uno generan rechazos en el otro.
Después de varios dimes y diretes, dos árbitros fueron consensuados por Boca y River y entre ellos el martes habrá un sorteo que determinará quien “jugará” el primer superclásico.
¡Y ese sorteo hasta podría ser televisado!
La rivalidad entre Boca y River es de tal magnitud, que las discrepancias por el arbitraje también los envolvió en la Libertadores. Conclusión, la Conmebol aprobaría que varios árbitros argentinos propuestos por Xeneizes y Millonarios vayan a sorteo, cuando habitualmente el juez es designado a dedo por la entidad rectora del balompié sudamericano.
El vicepresidente de Boca Juan Carlos Crespi se refirió al casi inédito acuerdo con River para “elegir entre seis o siete de los (árbitros) internacionales que le pasaremos a la Conmebol para que haga el sorteo”, según declaró ese dirigente el lunes a Radio La Red.
Los últimos superclásicos dejaron heridas sin cicatrizar no solo por el resultado sino por los arbitrajes. Cada club tiene su nombre preferido ya sea porque con ese juez las estadísticas lo favorecen o porque los jugadores de esa institución se sienten cómodos por la maneara de dirigirlos.
Boca y River ya salieron a la cancha aunque no haya fútbol el domingo, un día electoral en Buenos Aires del que saldrán los candidatos que competirán en los comicios de julio para suceder al actual jefe de gobierno Mauricio Macri. Durante 12 años y hasta 2007, Macri fue presidente de los boquenses cuando eran una máquina de ganar títulos.