Al sentir que nuestro hijo tiene fiebre, inmediatamente los padres experimentan ansiedad y preocupación, sin embargo, según la Asociación Española de Pediatría, la fiebre es una reacción normal de nuestro cuerpo, en la cual,tiende a combatir una infección y las defensas del organismo.

En una situación en la que un niño presente fiebre y sobre todo si esta se mantiene alta demasiado tiempo es importante, según los pediatras que los padres mantengan la calma y aprendan a reconocer cuándo es inevitable acudir al médico o cuando se puede tratar en casa.

¿Cuándo acudir al médico?

  • La fiebre la mediremos por medio de un termómetro, si su temperatura corporal supera los 38ºC en el recto o los 37.5 ºC en la axila, una temperatura inferior en estos casos lo consideraríamos febrícula y, si el niño es menor de 2 años consultaremos al médico en todos los casos.

  • Si el niño es mayor de dos años, se debe observar al niño y, acudir al médico si no mejora al cabo de 2-3 días o si empeora.

  • En el caso de que se presente una fiebre moderada hasta los 39ºC y si pasa de 39 ºC hablamos de fiebre alta, los expertos recuerdan que un no es lo mismo que un adulto supere o llegue a esa temperatura a que lo haga un niño, dado que este puede que se mantenga bastante espabilado.

Causas más comunes de la fiebre en niños:

  • Infecciones víricas.

  • Originadas por una bacteria.

  • Exceso de abrigo, esto produce un aumento de temperatura corporal.

De todas maneras, solo un médico diagnosticara la razón correcta por la que el niño tiene fiebre.

Recomendaciones:

  • Es importante que el niño ingiera abundantes líquidos, paños húmedos en la frente (a temperatura ambiente, nunca demasiado fríos, ni con hielo), así como baños en agua tibia durante 15 o 20 minutos.

  • Para bajar la temperatura también es posible administrar un medicamento para la fiebre en niños

  • No  es aconsejable combinar o alternar ibuprofeno y paracetamol.

Redacción/El Nacional