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Alejandro Santana/El Nacional

Debido a la gran demanda de docentes inconformes con la “Reforma Educativa”  donde el personal docente de la República mexicana tendrá que realizar un examen con el que será evaluado su desempeño,  maestros de la Escuela Primaria General Mariano Escobedo, lanzaron una demanda y una propuesta a la autoridad educativa.

La escuela está situada el municipio de Cadereyta, en el ejido Palmitos, y han expresado su inconformidad colocando una manta en la puerta de entrada del plantel.

“Yo estoy ¡Trabajando bajo protesta!”, es la leyenda que se puede apreciar en la lona puesta por los directivos de la primaria.

La indignación de los maestros no es tanto la evaluación, sino que el plantel educativo no cuente con las condiciones adecuadas, “piden evaluarnos pero no cumplen con mejorar la escuela, la condición en la que está no es la adecuada porque el apoyo de las autoridades no llega”, expresó una maestra del plantel.

La escuela lanzó una demanda en la que piden la nulidad de la llamada reforma educativa y sus leyes secundarias, haciendo referencia a los artículos 3° y 73 constitucionales, que fue diseñada como una “Reforma laboral-administrativa disfrazada de educativa, también piden que se garantice constitucionalmente la estabilidad laboral, que ningún trabajador de la educación  tenga que ser despedido ni afectado en sus derechos adquiridos como consecuencia de una medición punitiva.

En la propuesta para manifestar la inconformidad de los mismos, hacen a la vez la invitación a un paro laboral por una semana.

“Propongo paro laboral de una semana, del 6 al 10 de julio, en donde ningún alumno es afectado debido a que ya ha sido evaluado”, propuesta hecha por el profesor Salvador.

Defender el derecho de un área de trabajo digno a la calidad educativa deseada, un pago digno de un profesional, eliminación de las aportaciones voluntarias y que el gobierno se haga cargo de todo lo indispensable en una institución educativa, son solo algunas de las peticiones que maestros proponen en cuanto a esta acción.

Piden una evaluación justa, que sea para todo el nivel educativo empezando por el Secretario de Educación, Emilio Chuayffet, y tener un Secretario de Educación que conozca las necesidades del magisterio, alumnos y padres de familia.

“Nuestro objetivo no es afectar ni alumnos ni a padres de familia, sino, hacer valer sus derechos constitucionales; como una educación gratuita, que el gobierno, en este caso la autoridad educativa, debe costear todo lo necesario de las escuelas”, mencionó el maestro.