La noche del martes el Departamento de Policías de Morgan Hill informó, sobre un tiroteo en una concesionaria de Ford en California, la cual dejo como saldo tres personas muertas.
Alrededor de las 18:00 horas fueron alertados de disparos al interior del establecimiento, por lo que al llegar al lugar encontraron a dos empleados con heridas de bala, ambos empleados murieron antes de que pudieran ser traslada.
Testigos señalaron que el agresor había sido despedido ese mismo día por un directivo de la concesionaria.
“El director de servicio y autopartes acababa de despedir a un vendedor de repuestos que había dicho que iba despedir más temprano ese mismo día. Supongo que el vendedor salió, consiguió un arma fue a la oficina del director de servicio y autopartes y le disparó”, comentó un trabajador del del lugar.
El agresor después accionar el arma en varias ocasiones, decidió quitarse la vida.