Redacción/El Nacional


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Con polémica y un golazo de Aquino, los Tigres consumaron una victoria mas que los coloca como superlíder invicto del fútbol mexicano, todo esto al vencer 2-1 al Puebla.

Un partido parejo fue el que nos presentaron estos dos equipos en el Estadio Universitario, Tigres con mas llegada y Puebla apostando al contragolpe pero sin aproximaciones peligrosas, André-Pierre Gignac e Ismael Sosa se quedaron muy cerca de abrir el marcador con remates de cabeza.

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Gignac abrió el marcador de penal

Cuando el equipo felino jugaba mejor, un contragolpe de los camoteros bien orquestado terminó en anotación de Jerónimo Amione, lo curioso y polémico de esta jugada, fue que el abanderado, al momento de la celebración del Puebla, no corrió hacia medio campo como señala la regla, al contrario, se quedó parado en su lugar y el arbitro central, Paul Delgadillo, se acercó a platicar con el, instantes después se marcó el fuera de juego, desatando el jubilo de la afición local y el enojo de la visita.

A raíz de esto, Tigres se animo ir mas al frente y en una jugada orquestada por Guido Pizarro, les marcaron un penal clarísimo, mismo que el francés Gignac se encargó de anotar.

Para el segundo tiempo, los dirigidos por Ricardo Ferretti salieron con la misma intensidad, pero un descuido al minuto 63 provoco un penal para el equipo poblano, el encargado de anotarlo seria el ”Chavo” Alustiza, Andy Delort ingreso de cambio al minuto 77 por el argentino Ismael Sosa, desatando los aplausos de la afición.

Javier Aquino se convirtió en el héroe de la noche al marcar de fuera del área un golazo para poner en ventaja definitiva a su equipo y convertirlo así en el superlíder del campeonato con 19 puntos, por 18 de Tijuana quienes empataron ayer ante Pachuca.