Marcela Cortés/El Nacional
Como el mejor regalo de Navidad que pudo tener en su vida, definió Alfredo Solorio Torres, el implante de corazón que obtuvo el pasado 23 de diciembre, quien fue el último paciente del 2016 que recibió un miocardio.
Héctor David Martínez Chapa, director de la Unidad Medica de Alta Especialidad número 34, comentó que la operación fue todo un éxito y agradeció el apoyo de las autoridades, debido a que en esta última ocasión participaron en el traslado del órgano integrantes de la PGR y Protección Civil.
Tanto el beneficiado como el Director de la Clínica 34, exhortaron a los ciudadanos a unirse a la campaña de la donación de órganos, ya que dijeron es una segunda oportunidad para las personas que lo requieren.
“Que se unan a la campaña de la donación por que si se necesita bastante las donaciones, yo desde los 18 años saque mi primera licencia y yo siempre fui donador sin pensar que me iba a pasar esto a mi”, dijo Solorio Torres.
El paciente agradeció la atención de la clínica, los cuidados, así como a su familia que dijo que lo han apoyado en lo que necesita.
El receptor regiomontano de 40 años de edad, había sido diagnosticado con cardiomiopatía dilatada y estaba registrado en la lista de espera del CENATRA desde el pasado 6 de diciembre, pero su tratamiento inició en abril de 2015, tras presentar múltiples internamientos por falla cardiaca.
Durante el 2016, en el IMSS se llevaron a cabo un total de seis trasplantes de corazón, lo que sumo 67 realizados desde 1997.
Martínez Chapa informó que actualmente en Nuevo León existen tres personas en espera de un corazón, pero dijo que estas no se pueden lograr si no existen donadores por lo que reiteró el tener la cultura de la donación de órganos.