José Manuel Ramos, un sacerdote español, fue castigado por el Vaticano y suspendido por 10 años, tras haber sido acusado de abusar sexualmente de varios menores, hace más de tres décadas.
Este lunes, las autoridades eclesiásticas del norte de España informaron que tras realizar una revisión interna, el cura debe cumplir su castigo en un monasterio fuera de su diócesis del municipio de Astorga.
El obispo Juan Antonio Menéndez señaló que Ramos cometió dichos actos entre los años 1981 y 1984.
Agregó que debido a la vigencia del estatuto de restricciones, las medidas disciplinarias se pudieron aplicar, ya que el caso tampoco puede ser presentado ante las cortes de justicia, sin embargo ordenó que se abriera una carpeta de investigación para esclarecer los hechos.
Redacción/El Nacional