Agencia/El Nacional
Amnistía Internacional alertó ayer, en el Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de Tortura, que la lucha en México contra la impunidad en este tipo de violaciones se encuentra “lejos de alcanzar el camino hacia la justicia” puesto que las denuncias alcanzaron un 600 por ciento más en los últimos diez años.
“A pesar de que la tortura es generalizada en México y de que han aumentado las quejas por este flagelo en un 600% en los últimos diez años, existen únicamente siete sentencias condenatorias entre 2005 y 2013”, denunció el director ejecutivo de Amnistía México, Perseo Quiroz, en un comunicado.
En la asociación se siguen recibiendo informes de violaciones de derechos humanos cometidas a manos de policías y fuerzas de seguridad, entre las cuales se incluyen detenciones arbitrarias, actos de tortura y desapariciones forzadas.
Este aspecto “pone de manifiesto la impunidad imperante que favorece un patrón de repetición”.
Amnistía Internacional realizó ayer una demostración artística frente a la sede la Procuraduría General de la República (PGR) en la capital, en apoyo a las víctimas de tortura.
La organización instó a que, aprovechando el marco de este día, el gobierno federal concrete medidas específicas para poner fin a las torturas, teniendo como base la capacitación de los funcionarios públicos.
El primer paso hacia la erradicación es “el reconocimiento de la gravedad del problema, así como la investigación del fenómeno“, indicó el dirigente.
En este sentido, el organismo destacó la relevancia de los exámenes médicos-forenses para detectar los casos de tortura, pruebas que deben ser realizadas por peritos que cumplan los estándares internacionales.
“En el tema de tortura, uno de los principales problemas sigue siendo la falta de independencia de los peritajes médicos forenses oficiales y el garantizar que los independientes tengan el mismo valor probatorio en procesos penales”, aseguró.
Algunas de las causas que ha defendido Amnistía México en los últimos meses han sido las de Adrián Vázquez Lagunes, Yesenia Armenta y Ángel Colón, tres personas que son ejemplo de cómo la tortura es empleada por las autoridades para extraer “confesiones falsas”.
“La tortura no será erradicada si quienes torturan no rinden cuentas ante la justicia y las víctimas no son reparadas por su sufrimiento“, puntualizó Quiroz, en el marco de la manifestación frente a la PGR.