Debido a la toma de protesta de Donald Trump como 47 presidente de Estados Unidos, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, dejó claro que su gobierno no se someterá a la política del nuevo mandatario, quien asumió este lunes su segundo mandato en la Casa Blanca. Sheinbaum destacó que México “no tiene por qué agachar la cabeza” ante el presidente estadounidense, resaltando la dignidad y el orgullo nacional. 

“Somos un país grandioso, una potencia cultural, y las y los mexicanos somos un pueblo trabajador, honesto, fraternos, solidarios, tenemos mucho que presumir ante el mundo entero”, afirmó.

Sheinbaum, quien asumió la presidencia en 2024, se mostró dispuesta a mantener una relación “de iguales” con Estados Unidos, enfocada en la cooperación y el respeto mutuo. En su discurso, reiteró que el gobierno mexicano está preparado para abordar temas clave como la migración, el comercio, la seguridad y el narcotráfico, aunque aseguró que el diálogo y la negociación serán fundamentales para alcanzar acuerdos en estos ámbitos.

El regreso de Trump a la presidencia ha generado incertidumbre en México, especialmente tras sus amenazas de imponer aranceles a productos mexicanos si el país no toma medidas más drásticas contra la migración y el narcotráfico. Además, el equipo de Trump ha adelantado que las primeras órdenes de su administración estarán enfocadas en fortalecer la seguridad fronteriza, con un despliegue militar y la restauración del controvertido programa “Quédate en México”, que obliga a los solicitantes de asilo a esperar en territorio mexicano.

Pese a estas amenazas, Sheinbaum se mostró confiada en que será posible encontrar puntos de acuerdo con la administración de Trump, enfatizando el interés de su gobierno en dialogar sobre temas como la migración, el reconocimiento al trabajo de los mexicanos en EE.UU., el control de armas y la cooperación en la lucha contra el narcotráfico.

La mandataria destacó que la relación bilateral debe centrarse en una colaboración equitativa, en lugar de en una imposición unilateral por parte de Estados Unidos. De cara al futuro, Sheinbaum expresó su confianza en que ambos países lograrán acuerdos beneficiosos para ambas naciones, con un enfoque en la cooperación mutua y el respeto a la soberanía nacional.