Un estudio realizado en la Universidad de Harvard, reveló que las personas con un buen ánimo y optimista viven más tiempo después de su primer ataque cardíaco.
Lo anterior se debe a que el estrés es asociado a rasgos psicológicos negativos que pueden provocar lesiones en las arterias.
Los científicos encargados del estudio explicaron que las personas muy nerviosas, las que frecuentemente están molestas, ansiosas son las
“Es importante destacar que el optimismo no es simplemente un ‘fulgor rosa’ del mundo, sino que los optimistas tienden más a reconocer los riesgos y a planear cómo enfrentarlos”, dijo a Reuters, Yariv Gerber, el director de la investigación.
Explicó que las personas optimistas están mas dispuestos a enfrentar las dificultades como los cambios de estilo de vida que se recomiendan después de ataques cardíacos.
Para llegar a este resultado, los investigadores estudiaron a 664 personas menor de 65 años en 1992 y 1993; el promedio de edad en el momento del ataque cardíaco fue de 52 años, 15 por ciento eran mujeres.
Mientras los pacientes se recuperaban del infarto, en el hospital se les realizó una Prueba de Orientación de Vida, la cual evalúa el nivel general de optimismo o pesimismo.
Luego de descontar cosas como la edad, sexo, educación, empleo, consumo de cigarrillo y factores emocionales como la depresión y el apoyo social, el equipo encontró que el 30 por ciento de la gente en el estudio que tuvo los puntajes de optimismo más altos, presentó un 33 por ciento menos de probabilidad de morir en los años siguientes a su primer ataque cardíaco, con respecto a los demás.
Los más optimistas también tenían mayor educación, empleo y apoyo social, descubrió el estudio; y eran menos tendientes a fumar o padecer de depresión. Un creciente número de estudios científicos ha mostrado una conexión entre la salud emocional y la física, dice Heather Rasmussen una psicóloga de la Universidad de Kansas en Lawrence, a la que contactó Reuters Health.
Rasmussen, agregó que las personas tienen mas probabilidades tener conductas saludables y buscar apoyo social positivo de la gente que les rodea.
“Otros científicos han sugerido que el optimismo y las emociones positivas pudieran incluso tener efectos en la biología de las personas”, indicó la médico. “Todas esas ideas tienen apoyo de investigaciones, pero se necesitan estudios adicionales para saber más sobre esas relaciones”, agregó.