Una joven de 19 años que se perdió a su bebé producto de una violación, ahora es condenada a 30 años de prisión por el delito de “homicidio agravado”.
Los hechos ocurrieron en El Salvador, donde se castiga hasta con 40 años a las mujeres que aborten, incluso cuando lo hacen por complicaciones en sus embarazos.
De acuerdo a las autoridades, la joven Evelyn Hernández quedó embarazada tras una violación que no denunció porque fue amenazada de muerte y ocho meses después dio a luz a un bebé, que presuntamente asesino.
El Tribunal de Sentencia de la localidad de Cojutepeque condenó que Hernández tuvo al recién nacido en un municipio de El Carmen sin previa supervisión a los ocho meses, siendo tratado como un aborto.
La joven estudiante, que desconocía su situación parió en el baño artesanal de su hogar y debido a ciertas complicaciones fue trasladada al hospital de Cojutepeque, donde los médicos se dieron cuenta que había tenido un parto y dieron aviso a las autoridades.
Al presentarse la policía en el domicilio, localizaron el cuerpo y le practicaron una autopsia descubriendo que tenía 32 semanas e gestación y que murió por “neumonía espirativa”.
Sin embargo, la defensa Hernández explicó que ella había tenido un embarazo asintomático y que el bebé no había nacido con vida.
Ante esto, el juez dio valido como válidos los alegatos de la Fiscalía de que Hernández no buscó asistencia prenatal porque no quería al bebé y por ello lo tiró al retrete para matarlo; hasta el momento los forenses no han sido capaces de determinar si el bebé murió en el útero o fuera de él.
Varias organizaciones en defensa del aborto legal se encuentran cuestionando el caso, pues consideran que el fallo es una prueba más de “la fragilidad del sistema judicial, que no da ningún tipo de garantías procesales” y de “como se juzga en base a prejuicios y a la aplicación de estereotipos de género, del comportamiento que se supone debe tener una mujer”.
Con este caso, se suman 17 mujeres en El Salvador que se encuentran encarceladas por abortos, incluso por perdidas espontaneas dado a la severidad de las leyes anti-aborto en la nación.
