Redacción/ El Nacional
Cualquier persona que tenga acceso unos minutos al teléfono de una persona puede robarle la cuenta de WhatsApp y adueñarse de sus chats durante un tiempo. El servicio de mensajería propiedad de Facebook, como muchas otras aplicaciones, permite recuperar la contraseña a través de una llamada, cuando, por ejemplo, el sistema de verificación por SMS no funciona.
Según se explica en un blog sobre seguridad informática, esta forma de espiar el WhatsApp consiste en tener un teléfono con la aplicación recién descargada y sin activar, introducir el número de teléfono de la víctima y “solicitar que la verificación se haga por medio de una llamada de teléfono que te dé el código”. La app envía por defecto el código por SMS, tal como aclara la página de ayuda del servicio de mensajería, pero permite la opción de llamada si pasan unos minutos sin introducir el código.
Aunque el terminal de la víctima tenga activada la pantalla de bloqueo, la llamada entrante la desbloquea automáticamente, así pues, cualquier persona que esté cerca, en este caso, el atacante, pueda responder a ella, escuchar el PIN de verificación y activar la cuenta en su dispositivo.
La víctima se dará cuenta enseguida de la vulneración y solicitará su devolución, “aunque el proceso puede llegar a tardar unos 30 minutos”, explica el autor de la publicación.
Una solución temporal para protegerse de este tipo de ataques es, según añaden en el portal especializado, bloquear las llamadas entrantes desde el número con el que WhatsApp llama para realizar la verificación. La otra opción pasa por nunca dejar desatendido el teléfono en entornos de desconfianza.