La Comisión Disciplinaria tomó una decisión contundente tras el desafortunado incidente ocurrido en el estadio Miguel Alemán Valdés, donde el entrenador Paco Ramírez agredió al auxiliar técnico del Atlético Morelia, Norberto Scoponi. Ramírez no recibió clemencia y fue sancionado severamente por su comportamiento inapropiado.
El incidente tuvo lugar durante un tenso enfrentamiento entre ambos equipos en el que los ánimos se encontraban exaltados. Lamentablemente, Ramírez perdió el control y protagonizó una agresión física contra Scoponi, lo que generó una fuerte polémica y repudio por parte de la afición y la comunidad deportiva.
La Comisión Disciplinaria, encargada de velar por la integridad y el fair play en el fútbol, actuó de manera enérgica y tomó medidas ejemplares contra el entrenador de nombre reconocido. La sanción impuesta a Paco Ramírez incluye una suspensión de varios partidos, una multa económica significativa y la prohibición de acceder a las instalaciones deportivas por un período determinado.