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Redacción/El Nacional

1918862_1543517312609194_4648014462336957344_nIgual que todos los seres vivos, los peces necesitan tomar agua para sobrevivir. A pesar de vivir en el mar, el agua de ahí contiene una gran cantidad de sales.

La densidad del agua de mar, es de media de alrededor de 35 gramos por litro, que al disolverse en el agua se separan y forman iones: de sodio –ión positivo-, de cloruro –ión negativo-, de magnesio –ión positivo-, etcétera.

Para los peces que viven en agua salada es más difícil ingerir agua, que para los de agua dulce debido a la sal que compone el agua del mar.

Los peces están compuestos por líquidos orgánicos que se encuentran disueltos en sales en estado iónico y sienten sed cuando en el agua donde viven se concentran más niveles de sal que en sus propios organismos

Para eso, cuando están en contacto con el agua, los peces filtran el agua de mar a través de sus branquias, y se queden con el oxigeno y el agua. Los peces eliminan el exceso de sal a través de la orina y el epitelio branquial.