Redacción/El Nacional
Debido a que nuestro cuerpo funciona según el ritmo cardiaco y controla todos los organismos biológicos, el cambio de horario nos puede dar depresión, según especialistas en la materia.
Neurólogos y cardiólogos, afirman que debido a la movilidad de hábitos que se generan con el cambio de horario, nuestro sistema tiende a padecer depresión los primeros días por situaciones biológicas.
Un ejemplo es que a partir de las 9:00 horas nuestro cuerpo produce más testosterona, para ayudarnos a estar más activos. En cambio, alrededor de la medianoche aumenta la secreción de vasopresina, que inhibe la sensación de sed para que no nos despertemos para beber durante el sueño. Cuando adelantamos o atrasamos una hora del reloj, todas estas funciones quedan ligeramente desplazadas, dejándonos confundidos hasta que los ritmos circadianos se adaptan a nuestro nuevo horario.
Si los síntomas de depresión se extienden a más de una semana, los especialistas recomiendan acudir con un médico para hacer un diagnóstico adecuado.