La pandemia por covid-19 se convirtió en un nuevo mercado que explotar para la delincuencia, porque algunas bandas ahora se dedican al robo de insumos médicos, tanques y concentradores de oxígeno, los cuales hoy son vitales para evitar el contagio y para salvar la vida de personas que se encuentran delicadas de salud.
México no es la única nación que enfrenta el problema, porque desde el año pasado, la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito, alertó que la pandemia era la nueva mina de la delincuencia, y dio cuenta que algunos gobiernos estaban siendo víctimas de fraude.
De acuerdo con información oficial proporcionada por 12 Fiscalías generales de Justicia de nuestro país, de 2020 hasta marzo de este año, se han iniciado 77 carpetas de investigación por el robo de insumos médicos (cubrebocas, gel antibacterial, guantes quirúrgicos, protectores faciales), tanques y concentradores de oxígeno, entre otros.
Los delitos se perpetraron contra empresas, negocios, particulares, e incluso la Cruz Roja. Los datos recabados detallan que los delitos se cometieron en 36 municipios de 11 entidades, y en cuatro alcaldías de la Ciudad de México, lográndose detener sólo a 18 presuntos delincuentes.