Sin la autorización de las familias, los encargados de la demolición del casino Royale retiraron el memorial que se había colocado por las 52 personas fallecidas tras un ataque a ese lugar por parte de un grupo de la delincuencia organizada en 2011.
Al darse cuenta de estos actos, los familiares de las víctimas, acudieron a este sitio para protestar y exigir que se repare el daño.
“Este mural se vio opacado por la actitud de una persona que solamente ve sus intereses económicos, no le importó, ni le importan las 52 muertes que aquí hubo”, indicó una de las familiares.
Al lugar acudió personal de la Comisión de Derechos Humanos y del Municipio de Monterrey, quienes les aseguraron que reconstruirían la barda y colocarían de nueva cuenta el barandal con las cruces que se retiró.