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Redacción/el Nacional

Luego de entrar en la fase final de la construcción del viaducto subterráneo de la Línea 3 del Metro, la Secretaría de Obras Públicas arrancó con las actividades de  rehabilitación de la calle Padre Mier, sobre el sitio en donde pasa el viaducto subterráneo, al iniciar con el retiro de las bombas sumergibles extractoras de agua, colocadas a lo ancho de esta arteria, para posteriormente rehabilitar la zona del empedrado y abrir el tramo a la vialidad.

Desde hace unos días, trabajadores de la obra comenzaron a desconectar las mangueras y las cajas eléctricas que alimentaban estas máquinas utilizadas para el proceso de extracción de agua, el cual permitía mantener seca la zona de labores bajo el subsuelo.

Actualmente el tramo en donde se hicieron las perforaciones se encuentra entre Florencio Antillón y Doctor Coss, sin embargo el retiro de bombas comenzó sobre la calle Padre Mier entre Diego de Montemayor y Dr. Coss, lugar en la que se ya se realizan las labores correspondientes a la remediación para dar paso a los vehículos.

Entre la avenida Constitución y la calle Diego de Montemayor, los equipos continúan instalados, ya que aún se requiere de su funcionamiento para la construcción del túnel. Sin embargo, en próximas semanas serán desconectados también para dar paso al remozamiento del sitio.

Además del pavimento, también se realizará la limpieza del lugar y la rehabilitación de las fachadas de cada uno de los inmuebles cercanos a la zona de construcción.

Tras varios meses de trabajo, la dependencia estatal reporta cero daños estructurales a los edificios y casas del Barrio Antiguo.

Será en abril cuando la calle Padre Mier quede totalmente liberada tanto para el flujo vehicular como el peatonal, así como para que las personas puedan utilizar de nueva cuenta sus propiedades, mismas que fueron arrendadas durante el proceso constructivo.

La rehabilitación total de esta arteria comprende desde la calle Dr. Coss hasta la calle Florencio Antillón y la inversión para estos trabajos se incluyó dentro del contrato correspondiente a la construcción del viaducto subterráneo de la Línea 3 del Metro, el cual asciende a 370 millones de pesos.