La reina Isabel II acudió al Manchester Children’s Hospital para visitar a las 12 víctimas menores de 16 años que fueron hospitalizadas de emergencia luego de las explosiones efectuadas el pasado lunes durante un concierto de Ariana Grande.
Para la monarca de 91 años de edad, el hecho fue un calificado como “terrible” y “muy malvado” mientras convivía con una de las heridas, Evie Mills de 14 años y sus padres.
Otra de las víctimas con la que pudo platicar su majestad fue Millie Robson de 15 años, quien a pesar de las heridas y seguir en cama, lució su fervor hacía la cantante Ariana Grande vistiendo una de sus playeras.
La pequeña Millie le platicó a la Reina que pudo conocer a su ídolo pop, Ariana, detrás del escenario de la Arena Manchester, ya que había ganado unos boletos VIP.
De igual forma la madre de Robson le externo a la Reina Isabel II la preocupación que vivó al estar esperando a su hija a las afueras del reciento mientras se detonaban las explosiones. “No es algo que esperas”, dijo la madre a su majestad.
Tras finalizar su recorrido por el nosocomio, Isabel II fue despedida con fuertes aplausos, no sin antes haber agradecido a médicos, enfermeras, paramédicos y todo el personal que trabaja para salvar vidas.