Redacción/ El Nacional


De acuerdo con el biólogo Roberto Chavarría, la estación de monitoreo ambiental en Cadereyta podría estar registrando valores imprecisos, puesto a que los vientos del municipio no llegan directamente a las mediaciones.

La estación instalada el pasado 20 de agosto en Cadereyta, no ha estado registrando los valores correctos, debido a que los vientos que contienen las partículas contaminantes, “Vienen del Golfo de México, pero por su cercanía con la sierra, muchos se ‘rebotan’ hacia la refinería, aventando el humo hacia la área metropolitana de Monterrey, por el área de Guadalupe”.

Esta entidad no es la única que no ha funcionado correctamente, puesto a que en García y Santa Catarina es muy común que se obtengan los peores registros del Sistema de Monitoreo Ambiental, “por las industrias y por los vientos que fluyen hacia alla”, según Chavarría.

Este problema se debe a que las estaciones de monitoreo se quedan “cortas” al no poder registrar la realidad de la calidad del aire que respiramos los nuevoleoneses, por las dimensiones propias de cada municipio.

Por su parte, le biólogo recomendó tener al menos dos estaciones por municipio, con el fin de tener una dimensión más certera de la calidad del aire, debido a que “los municipios son tan grandes, que una sola estación no representa todo lo que es; por ejemplo, la zona industrial de San Nicolás no representa lo que es la zona de Las Puentes”.

Cabe mencionar que si comparamos la cantidad de estaciones habilitadas en Nuevo León con el número de las que revisan la calidad del aire que respiran los habitantes de la Ciudad de México, nuestro estado apenas llega a un 36.7% de las que tiene la capital del país, pues apenas llegamos a 11, mientras la capital del país tiene 30 estaciones.