Mónica De Robles @elnacionalred
Con el objetivo de ocultar canas o el simple hecho de cambiar de tono de color de cabello, hombres y mujeres optan por recurrir a la aplicación de tintes en el cabello para mejorar su aspecto personal.
Pero se han puesto a pensar en lo dañinos que en ocasiones pueden resultar para la salud; de acuerdo con diferentes estudios y especialistas aseguran que tanto los tintes como los permanentes que se utilizan para el cabello son cancerígenos.
Los que más expuestos están a reacciones negativas son los estilistas, por ser los que tienen contacto con más frecuencia con los tintes, por ser una de sus herramientas de trabajo.
Algunas de las recomendaciones para que teñirse no se convierta en una mala experiencia, tienen que ver con la preocupación por no abusar de los químicos, colorar sólo las raíces luego de la primera experiencia y “tratar de no colocarse un color muy artificial, pues lo más dañino es aclararse mucho el pelo”, advierte.
Los investigadores aconsejan:
En el caso de la aplicación casera, “usar siempre guantes”, para de esta manera tener el menor contacto posible con el producto.
Cualquier alteración del cuero cabelludo, consultar con un especialista.
En el caso de sequedad, utilizar cremas o aceites humectantes para así proteger el pelo.
Frente a una alergia en el cuero cabelludo, se recomienda es suprimir el uso de tinturas (por lo menos de las permanentes).
