Redacción/El Nacional
El parlamento canadiense de Quebec aprobó este miércoles una polémica ley que prohíbe tener el rostro cubierto para ofrecer o recibir servicios públicos, una medida que se enfila contra el uso del velo integral como la burka en la administración pública.
La ley sobre “la neutralidad religiosa del Estado quebequés” va dirigida tanto para los funcionarios de los gobiernos provinciales y municipales como a los ciudadanos que solicitan sus servicios.
Toda persona que ingrese a una oficina gubernamental, aborde un autobús o acuda a una escuela u hospital deberá ser fácilmente reconocible y tener el rostro libre de todo accesorio de vestimenta.
La ley 62 señala la importancia de “tener el rostro descubierto durante la tramitación de servicios públicos para garantizar la calidad de la comunicación entre las personas, permitir la verificación de su identidad y por razones de seguridad”.
Ante dicha decisión se prevé la posibilidad de que los ciudadanos soliciten adaptaciones “razonables”, que serán evaluadas caso por caso, así mismo la ley no prohíbe a los funcionarios portar símbolos religiosos.
Este tema es sensible en Canadá, donde la población dio la espalda al catolicismo en los años 60, pero donde movimientos de extrema derecha han estado surgiendo recientemente en protesta contra comunidades inmigrantes.
Por otro lado, el alcalde de Montreal, Denis Coderre, quien considera que su ciudad será mayormente afectada por la medida, denunció la ley como “inaceptable” y de difícil aplicación en el día a día.
Esta decisión secunda a otras leyes de aplicación similar en países europeos, tales como Francia que en el 2012 prohibió el uso de cualquier velo integral en espacios públicos (no solo en edificios administrativos, sino en la calle), por respeto a la mujer y, sobre todo para garantizar su identidad.