Miles de personas se reunieron este sábado en la marcha de protesta convocada en París por los “chalecos amarillos” para denunciar la violencia policial, entre ellos algunos líderes de facto del movimiento contestatario.

Aunque la protesta inició pacíficamente, horas después la policía comenzó a lanzar gases lacrimógenos y pelotas de goma, supuestamente en respuesta al lanzamiento de proyectiles por parte de algunos manifestantes en la zona de la plaza de la República, en el centro de París.

Esta duodécima jornada de protesta, que se inició el pasado 17 de noviembre para denunciar el alza del precio de los carburantes, también ha tenido eco en otras ciudades francesas, como Valence (sureste), Tours (centro) o Rouen (norte), entre otras.

“El tema de hoy es la violencia policial, porque es insoportable. Nos prohíben manifestarnos y nos disparan sin ninguna razón. Hay una gran represión. Hay muchos heridos. Nacimos como un movimiento pacifista y no se entiende esa violencia”, dijo a Efe M. Leduc, de 36 años, uno de los participantes.

Leduc, que reside en las afueras de París, llevaba un parche como tributo a los manifestantes que han perdido un ojo supuestamente por las pelotas de goma disparadas por los policías durante las protestas.

La marcha contó con la presencia de Jérôme Rodrigues, uno de los símbolos del movimiento desde que denunció haber sido herido en un ojo por los disparos policiales.

Rodriguez, subido a una tarima, exhortó a los participantes en la protesta, en la que también participó Eric Drouet, el joven camionero que figura entre los impulsores de los “chalecos amarillos”.

“Las pelotas de goma no se utilizan de manera correcta, por lo que queremos que se prohíban (…) Queremos destacar en esta protesta a los heridos, porque los medios de comunicación los ignoran”, indicó a Drouet, quien calculó más de 100 heridos en el ojo por los disparos policiales.

Redacción/ El Nacional