Redacción/ El Nacional
Luego de hacerse oficial el cambio de sede del equipo de los cargadores, quienes jugarán a partir de la temporada 2017 de la NFL en la ciudad de Los Ángeles, la respuesta por parte de los aficionados de San Diego no se hizo esperar.
Fue alrededor del medio día del jueves cuando Dean Spanos, propietario de los cargadores, emitió un comunicado a través de las redes sociales donde confirmaba los rumores que circulaban con anterioridad sobre el cambio de ciudad de su equipo.
De inmediato surgieron comentarios negativos en la misma publicación, que iban desde insultos a los directivos hasta sugerencias a Spanos de abandonar la dirigencia de los cargadores.
Más tarde, aficionados se dieron cita en las oficinas del equipo, donde aventaron huevos a las instalaciones además de tirar y quemar artículos como jerseys y banderas afuera del Qualcomm Stadium, el que hasta hace unas semanas era la casa de los cargadores.
