El gobierno de Tamaulipas ha rechazado categóricamente la posibilidad de utilizar aguas nacionales de las presas Marte R. Gómez, El Cuchillo y La Boca para saldar la deuda hídrica de México con Estados Unidos, señalando que dicha acción violaría el Tratado de 1944. Este acuerdo estipula que únicamente pueden emplearse aguas internacionales para cubrir estos compromisos, afirmó Raúl Quiroga, secretario de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social del estado.

La controversia surgió a raíz de la firma del “Acta 331” entre representantes de ambos países en la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), que contempla el uso de aguas del río San Juan, una cuenca 100% mexicana, para el pago. Esto ha generado protestas, ya que, según el tratado, solo las aguas de los ríos Bravo y Colorado están sujetas a distribución internacional.

“El tratado es claro: las aguas del río San Juan son mexicanas. No podemos permitir que se utilicen para cumplir un compromiso binacional”, enfatizó Quiroga.

Actualmente, la deuda asciende a 1,200 millones de metros cúbicos y, según el acta firmada el 7 de noviembre, se prevé su liquidación para octubre de 2025, utilizando agua de las presas internacionales Falcón y La Amistad, y de la Marte R. Gómez.

El gobierno tamaulipeco advirtió que, de proceder este acuerdo, Nuevo León tendría que enviar agua de sus presas a Tamaulipas para compensar la extracción, lo que afectaría el suministro en ambas entidades.

Mientras tanto, Agua y Drenaje de Monterrey aún no se ha pronunciado oficialmente sobre este tema, aunque la polémica crece entre los estados afectados por el manejo del recurso hídrico y la presunta violación del acuerdo internacional.

Redacción/El Nacional