Cómo consecuencias de diversos reportes, la delegación en Nuevo León de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), clausuró la zona conocida como Lomas de Mortero, en La Huasteca.
En el Congreso del Estado, la comisión correspondiente lanzó un exhorto a la Secretaría de Desarrollo Sustentable y al Parque Nacional Cumbres para vigilar la zona.
Los legisladores, Luis Armando Torres Hernández de Morena y Carlos de la Fuente del PAN encabezan las diligencias emprendidas, siendo el blanquiazul quien aseguró que la Secretaría se ha tardado en actuar.
Entre las especificaciones que hicieron en el Congreso están las afectaciones a más de 19 kilómetros de ríos, entre ellos el río Santa Catarina, la Cañada Los Nogales, los arroyos de los cañones de Las Escaleras y Ballesteros fueron rellenados con escombro, dañando severamente las cuencas hidrológicas de La Huasteca.
Así mismo, Torres Hernández mencionó que durante ocho años (del 2011 al 2019), realizó una lista de los daños que se habían generado en la zona de la Huasteca.
Por su parte, el delegado de la Profepa en el estado, Aarón Mendoza, informó a detalle sobre las acciones que se emprendieron en la Zona Natural de Santa Catarina al presentar una denuncia y tras sostener una reunión de trabajo.