El Apple Watch de primera generación ha sido oficialmente declarado obsoleto por Apple después de siete años de soporte y reparación.

Aunque esta generación dejó de recibir actualizaciones de software en 2018, los dispositivos seguían siendo utilizables hasta ahora.

Sin embargo, con esta declaración de obsolescencia, Apple retirará el soporte completo, incluyendo piezas y servicios de reparación para estos relojes, lo que significa que los propietarios que necesiten reparaciones deberán recurrir a centros no autorizados por Apple.

Esto afecta a todas las versiones de Apple Watch de primera generación, incluyendo el costoso modelo de oro de 18 quilates que tenía un precio de 17.000 dólares.

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El Apple Watch original, lanzado en 2015, marcó el inicio de la exitosa línea de relojes inteligentes de Apple, pero su vida útil llega a su fin debido a la degradación de la batería y la falta de disponibilidad de piezas de repuesto por parte de Apple.

A pesar de su intento de ingresar al mercado del lujo con el modelo de oro, el hecho de que los relojes premium tradicionales tienden a durar décadas, mientras que los smartwatches tienen limitaciones en términos de batería y tecnología, lo ha llevado a su obsolescencia.

Los propietarios de estos relojes enfrentarán desafíos si necesitan reparaciones o reemplazo de batería, ya que Apple ya no ofrecerá servicios de soporte para esta generación.

En resumen, el Apple Watch de primera generación, incluyendo la versión de oro costosa, ha sido declarado oficialmente obsoleto por Apple después de siete años de soporte, lo que significa que ya no recibirán reparaciones ni servicios de soporte por parte de la marca. Esto plantea desafíos para los propietarios que necesiten mantener sus relojes funcionando en el futuro.