Un policía en Florida se suicido después de privar de la vida a su esposa, frente a sus cuatro hijos menores de edad, quienes alertaron a las autoridades.
El comandante policial Chris Nocco informó que un joven de 14 años salió del lugar de los hechos y llamó a la policía.
Al llegar al domicilio, los agentes confirmaron la muerte del hombre y la mujer, a quienes se les identificó como Kirk M. Keithley de 39 años y Samantha Keithley, de 33.
Se informó que el responsable de lo ocurrido tenía al menos nueve años en el departamento policial del condado de Hillsborough.
El jefe de policía local, Chad Chronister señaló que en 2016 el sujeto recibió una amonestación por “uso indebido de equipos de telecomunicaciones”, además de una carta en la que le recomendaban buscar ayuda psicológica tras “un accidente vial que pudo haberse evitado” en 2011.