Unos de los escándalos más sonados del candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, es el que involucra a Tara Reade, una mujer que trabajó con él hace 30 años y quien lo acusó en marzo de haber abusado sexualmente de ella en 1993.
Por si fuera poco, más de una decena de mujeres también lo han denunciado por acoso, pero el aspirante a la presidencia negó los hechos al declarar que “no son ciertas, esto no sucedió”.
De acuerdo con Tara Reade, el abuso ocurrió estaban solos en un edificio de oficinas de la Cámara de Senadores, dónde la acorraló contra una pared.
El ex vicepresidente de Estados Unidos también negó haber besado a una ex legisladora que señaló haber sido “mortificada” cuando Joe Biden le plantó un “gran, lento beso” atrás de la cabeza cuando iba a participar en un mitin en Nevada en 2014.
“Ni una sola vez, nunca, pensé en haber actuado de manera inapropiada”, se defendió el demócrata.