Redacción/El Nacional
Los teléfonos inteligentes podrían convertirse en una herramienta factible para diagnosticar ciertos tipos de cáncer, según un estudio publicado en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
Los autores proponen un método basado en la difracción que permite la diagnosis celular y molecular, hasta ahora de difícil implantación, en teléfonos inteligentes.
El sistema de difracción digital (D3) usa micropartículas para generar patrones de difracción únicos que pueden ser aprendidos por un teléfono inteligente y procesados por un servidor remoto ofreciendo un diagnóstico en unos 45 minutos.
En el estudio, los investigadores aplicaron la plataforma D3 para examinar células precancerosas y cancerosas y detectar el virus del papiloma humano.
“Este método podría aplicarse con buenos resultados en entornos donde el acceso médico es limitado”, defienden los autores del estudio.
Según los investigadores, el ensayo, que actualmente cuesta 1,80 dólares por diagnóstico, demuestra la viabilidad de un enfoque de diagnóstico basado en teléfonos inteligentes y en entornos con recursos limitados.