El Décimo Tribunal Colegiado Penal en la Ciudad de México, negó un amparo a Jaime González Durán, alias “El Hummer” uno de los 31 miembros fundadores originales y el tercero al mando de la organización criminal conocida como Los Zetas contra la orden para ser extraditado y juzgado por narcotráfico en Estados Unidos.

El Tribunal Federal concluyó en su sentencia de amparo en revisión, que todos los argumentos que presentó el presunto líder criminal -de 48 años de edad y ex miembro del Cuerpo de Fuerzas Especiales de México (anteriormente llamado Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales o GAFES)-, contra su extradición a EE.UU., eran infundados e inoperantes.

“El acto reclamado en el que el Secretario de Relaciones Exteriores [Marcelo Ebrard Casaubón] otorgó la extradición del quejoso, es un acto soberano, facultad discrecional del Ejecutivo Federal, el cual de manera alguna se ejerce arbitrariamente, sino que está condicionado a que durante el procedimiento se cumpla con los requisitos constitucionales, legales y convencionales”, indicó el fallo.

“Por tanto, si como quedó asentado en la presente resolución, el Secretario de Relaciones Exteriores [SRE] cumplió con las formalidades del procedimiento, y además fundó y motivó debidamente el acto reclamado, resulta evidente que el Ejecutivo se encontraba en condiciones de acceder a la petición formal para extraditar al revisionista al país solicitante”, abundó el Tribunal.

La defensa del ex militar acusó que el pedido de extradición carecía de indicios suficientes para justificar el enjuiciamiento, sin embargo, el Tribunal Federal estableció que en procesos de este tipo las autoridades mexicanas no pueden valorar las pruebas del país requirente.

Los abogados de “El Hummer” plantearon, también, que la acusación por la que pretendían juzgarlo había prescrito, sin embargo, el órgano colegiado también sentenció que dicho argumento no tenía fundamento, ya que si bien los hechos que le imputan ocurrieron entre el 2000 y 2010, por una parte la acusación ante la Corte Federal fue presentada el 9 de mayo de 2013.

Además, el delito contra la salud que le imputan las autoridades estadounidenses a González Durán, en las modalidades de producción, distribución y fabricación de cocaína y mariguana, tiene una pena de 10 a 25 años de prisión, por lo que, el término medio aritmético es de 17 años y seis meses.

“El Hummer” nació el 22 de enero de 1976 en el municipio de Aquismón, San Luis Potosí, y en su juventud entró a las filas del Ejército Mexicano, del que desertó el 24 de febrero de 1999, cuando estuvo comisionado como agente de la Policía Judicial Federal en Tamaulipas.

El 7 de noviembre de 2008 fue capturado en Reynosa, Tamaulipas, con 150 mil dólares en efectivo y un arma de fuego de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas. Hasta el momento, González Durán está preso en el Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 11, de Hermosillo, Sonora.

En México, “El Hummer” ha sido sentenciado en tres procesos distintos a penas que en su conjunto suman 73 años de cárcel. En una, fue condenado a 35 años de prisión por delincuencia organizada y privación ilegal de la libertad; en otra, a 16 años y seis meses por lavado de dinero; y en el último caso, a 21 años y nueve meses, por violación a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos.

González Durán es desertor del Ejército, donde fue integrante de los GAFES, la unidad de élite de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), que se encargaba de localizar y capturar a los principales capos del narcotráfico.

Junto a al menos 3 decenas de desertores de este grupo militar, entre ellos Heriberto Lazcano Lazcano, “El Lazca”, y Arturo Guzmán Decena, alias “El Z1”, se hicieron guardaespaldas de Osiel Cárdenas Guillén, el entonces líder del Cártel del Golfo, formando así la organización criminal de Los Zetas.

A “El Hummer” se le vincula con la muerte del cantante sonorense Valentín Elizalde Valencia, también conocido como “El Gallo de Oro”, quien fue asesinado en noviembre de 2006, tras una presentación en Reynosa, Tamaulipas.

El móvil del asesinato sería la canción titulada ‘A mis enemigos’, compuesta como una loa para el capo sinaloense Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”, entonces líder del Cártel de Sinaloa, principal enemigo del Cártel del Golfo.