Redacción/ El Nacional
Una piedra preciosa que cuenta con propiedades curativas, es el ámbar, proviene de la savia de los árboles llamados Pinus Succinífera, ahora extintos. Se cree que esta piedra posee la fuerza, el espíritu y la energía de los mismos. El ámbar del Báltico posee una mayor cantidad de ácido succínico, un ingrediente activo para el beneficio del cuerpo humano, y qué mejor si se utiliza en el cuerpo del bebé, ya que cuenta con múltiples beneficios para él.
Y es ideal usarlo en la etapa de la dentición, ya que esta piedra le proporciona el alivio a través del ácido succínico, pues es ahí donde se liberan todas sus propiedades. Al entrar en contacto con la piel y comenzar a calentarse, el ámbar libera naturalmente sus aceites en el cuerpo del bebé, quienes lo absorben de manera natural.
El ácido succínico es un antioxidante que alivia el daño celular, además que posee propiedades antiinflamatorias, estimula la glándula tiroidea que ayuda a reducir la producción de saliva y equilibra la irritabilidad o el mal humor del bebé. Además cuenta con otros beneficios para la piel, como el eczema, que se refiere a un conjunto de afecciones dermatológicas que se pueden presentar por lesiones inflamatorias.
También ayuda al fortalecimiento de los riñones y la actividad intestinal. Estimula el sistema nervioso y la función cerebral mejorando la conciencia, concentración, reflejos y la reducción del estrés.
Esta piedra curativa es muy beneficiosa para el organismo, ya que brinda el 100% de efectividad y se recomienda que sean usados en todo momento en contacto con la piel para que se comience a ver el efecto de sus propiedades.
*El ámbar no es un mineral, es una resina orgánica fosilizada.
*Su nombre proviene del árabe “alcarabe” que significa “inflamable”.
*Los árboles llamados Pinus Succinífera de donde proviene la piedra, habitaron en la hoy conocida como región Báltica (norte de Alemania, Polonia, Dinamarca, parte de Rusia, Estonia, Latvia, Lituania, Ucrania y Suecia) durante la segunda era terciaria de la tierra.