Este viernes la policía rusa detuvo a un pasajero en el aeropuerto moscovita de Domodédovo por bromear con que llevaba una bomba encima cuando pasaba por uno de los controles de seguridad.
Seguido fueron activados los protocolos de seguridad contemplados para estos casos.
Más tarde una fuente policial indicó que el viajero confesó en el interrogatorio haber bromeado sobre la bomba que supuestamente llevaba en la riñonera.
Los agentes no hallaron ningún objeto sospechoso y el aeropuerto pudo continuar sus operaciones con normalidad.