La Federación de Fútbol de Noruega anunció que se abstendrá de apoyar la ratificación de Arabia Saudita como sede de la Copa del Mundo 2034 durante la reunión de la FIFA este miércoles, argumentando que el organismo ha incumplido sus propios estándares sobre derechos humanos y gobernanza.
Lise Klaveness, presidenta de la federación noruega, señaló que la FIFA no ha integrado adecuadamente las directrices de derechos humanos en el proceso de selección, aumentando el riesgo de violaciones en el contexto del certamen. “Esto desafía la confianza en la FIFA como custodio global del fútbol”, declaró Klaveness en un comunicado.
La reunión en línea de las 211 federaciones que componen la FIFA también ratificará la decisión de otorgar el Mundial 2030 a un proyecto multinacional que incluye a España, Portugal, Marruecos, Uruguay, Argentina y Paraguay. Sin embargo, Klaveness enfatizó que estas decisiones ya fueron tomadas previamente, sin un proceso de votación abierto y transparente, lo que consideró contrario a principios de gobernanza sólida.
Por su parte, Dominique Blanc, presidente de la Federación Suiza, instó a la FIFA y a los organizadores a cumplir con compromisos relacionados con los derechos de trabajadores, aficionados y periodistas. Sin embargo, el organismo enfrenta críticas por su falta de acción en relación con las condiciones laborales en Qatar durante el Mundial 2022.
El informe de un panel de expertos en derechos humanos, retenido durante casi un año, fue publicado días después de que la FIFA anunciara un fondo de legado de 50 millones de dólares para proyectos de caridad, sin destinar compensaciones directas a los trabajadores afectados en Qatar.
La postura de Noruega subraya las crecientes tensiones entre la FIFA y las federaciones europeas, que demandan mayor transparencia y compromiso con los derechos humanos en la organización de sus eventos.
Redacción/El Nacional