Un niño chileno de tres años, jugaba con sus compañeros a “vender” cocaína a sus compañeros en un intento de imitar a sus padres, que terminaron detenidos mientras el y su hermana menor fueron entregados al Servicio Nacional de Menores.
Según un medio local, al pequeño se le cayó un papelillo al bajar del autobús que lo trasladaba hasta el centro escolar, hecho que fue advertido por la conductora del vehículo, que de acuerdo con el protocolo, llamó a la policía.
El niño comenzó a vocear inocentemente la mercancía mientras sus compañeros jugaban en el jardín. Cuando la policía llegó al lugar llamaron a los padres, quienes quedaron detenidos.
Ambos padres de 18 y 20 años, fueron formalizados por tráfico de drogas y tenencia y porte ilegal de armas.
