Durante la sesión donde se votaban transitorios, el presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, mandó a ‘chingar a su madre’ a los diputados, creyó que le habían cerrado el micrófono.
“Revise su reloj porque está marcando progresivamente, cuando es una ley antigua los transitorios son desmesurados y contradictorios, hasta los aparatos se sonrojan“, indicó Muñoz a un legislador del pleno.
Posteriormente, Muñoz se dirige con la diputada Dolores Padierna, quien está a su izquierda y le comenta “chinguen a su madre, qué manera de legislar“, por lo que Padierna le cerró el micrófono.
Porfirio Muñoz anunció el día de ayer su retiro de la presidencia de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, donde mencionó “no seré obstáculo para los entendimientos” y que garantizará los acuerdos.