Una mujer de 65 años de edad de Reino Unido fue detectada por su perra de raza pastor alemán, que tenía cáncer de mama, lo que le ayudó a poder atenderse a tiempo.

De acuerdo con la mujer, un día se encontraba sentada en el sofá cuando la perrita salto y empezó a olerla y a golpearla desesperadamente en el pecho, siendo la primera vez que se comportara así.

Al paso de los días, la perra seguía pegándole por varias ocasiones en el pecho por lo que la fémina de nombre Linda, decidió ir a checarse para hacerse estudios.

Tras realizarse los análisis, los resultados arrojaron que tenía una forma de cáncer que le podía crecer muy rápidamente y podía extenderse a los nodos linfáticos.

Posteriormente la hija de la perra, Enya, empezó a hacer lo mismo que su madre: olía y golpeaba con insistencia el pecho de Linda.

Afortunadamente después de seis meses Linda se curó y desde ese entonces no deja de compartir su historia y está realmente agradecida con sus caninas que le salvó la vida.

Redacción/El Nacional