Un atentado bomba en un mercado, en la ciudad de Quetta, en el suroeste de Pakistán, dejó como saldo 20 personas sin vida y 48 heridos, este viernes.
El subinspector general de la Policía, Abdul Razzaq Cheema, quien estuvo presente en el lugar de la explosión, señaló que el ataque fue dirigido contra la comunidad chií hazara.
“El ataque tuvo lugar contra una tienda de verduras. Un artefacto explosivo improvisado fue colocado en un saco lleno de patatas. Nuestros expertos dirán si fue activado con temporizador o por control remoto. Están ahora investigándolo”, indicó el jefe policíaco.
Del total de víctimas mortales, ocho son hazaras. Además, ha muerto un soldado del Cuerpo de Fronteras y dos dependientes de la tienda, varios empresarios y ciudadanos que residían en la zona. Entre los heridos figuran cuatro militares del Cuerpo de Fronteras.
Los heridos han sido trasladados al Centro Médico Bolan para recibir tratamiento y se ha declarado la emergencia en los hospitales de la zona. “Hemos gestionado el transporte para que los hazaras que han resultado ilesos en el ataque puedan regresar”, indicó el alto mando policial.
El primer ministro de Pakistán, Imran Khan, condenó el atentado y expresó su dolor por la pérdida de vidas inocentes y ordenó a las autoridades que garantizaran el mejor tratamiento médico para los heridos.