Redacción/El Nacional

Un menor de apenas un año siete meses de edad, murió asfixiado 16 días después de que se tragó una pila, de las utilizadas en relojes y alarmas de carro, la cual estaba atorada en la tráquea.  Los padres del menor como los médicos no se dieron cuenta de lo que paso hasta que el menor había fallecido.

El martes pasado, el menor fue trasladado de urgencia de Piedras Negras a Saltillo, pero a mitad del trayecto falleció.

Agente del Ministerio Público dio fe del deceso informando que la necropsia de ley practicada al cuerpo del menor reveló que las causas del deceso fueron: “Asfixia por oclusión de vías áreas por cuerpo extraño localizado en tráquea a nivel de la cara”.

Los padres culpan de la pérdida de su hijo al médico del Hospital General “Salvador Chavarría”, quien lo atendió primero y, sin haberlo curado, lo dio de alta tres días después. Ya que el médico no ordenó que se le tomaran radiografías, donde fácilmente se detectaría la presencia de un objeto extraño en su garganta.