Un hombre de más de 60 años ha decidido vivir en una roca de 40 metros de altura que se encuentra en el pilar de Katskhi, aproximadamente a 10 kilómetros de Chiatura, una ciudad minera de Georgia.
En este lugar tan alto vive Maxime Qavtaradze un monje que en 1993 después de pasar dos años en prisión por consumo de drogas, decidió tomar los votos monásticos y así subir a lo más alto para “estar cerca de Dios”.
En el lugar únicamente se encontraba una pequeña y vieja capilla, la cual al pasar de los años el transformaría en su hogar, donde ha pasado los últimos 20 años.
Una escalera metálica es la que conduce a la sima, un monolito de piedra caliza, Maxime baja desde la cima para platicar a modo de consejo con jóvenes que requieren orientación, luego regresa “al cielo”, lo que le toma 20 minutos del suelo a la sima.
En el lugar se pasa horas leyendo y orando para poder reunirse con “el creador”, sus seguidores le envían alimentos y provisiones por medio de un gancho.
