La mujer indocumentada y madre de cuatro hijos, Jeanette Vizguerra, la cual vive refugiada en una iglesia en Denver, Estados Unidos desde febrero, ha sido nombrada como una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Time.
Refugiada en la Primera Iglesia Unitaria en Denver desde mediados de febrero, tras negarle la extensión de su estadía en el país por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), esto después de la promesa del presidente Donald Trump de expulsar a millones de indocumentados.
Y así terminó, con sus tres hijos menores de 12, 10 y seis años y ciudadanos estadounidenses, en esta iglesia del Unitarismo universalista, dispuesta a quedarse lo que sea necesario, incluso los cuatro años del gobierno republicano.
“La gente afuera piensa que es duro, se pregunta cómo puedo sacrificar tanto. Pero cuando veo a mis niños, los veo saludables, felices. Puedo para estar aquí y abrazarlos y tenerlo a mi lado. Estoy dispuesta a hacer lo que sea, estoy dispuesta a sacrificar lo que sea necesario para poder estar con mis niños”, reiteró.
Aunque permanecía como irregular y tener dos delitos menores, Vizguerra había logrado permanecer en el país porque “su caso no era prioridad”.
Todo cambió con la orden ejecutiva de Trump, donde el ICE podía arrestar y deportar personas: acusadas de crímenes pero no condenadas, personas sospechosas de actividades criminales pero no acusadas, y personas acusadas de delitos menores.
Ahí entra la mujer, además es activista por los derechos migrantes y muy conocida en su comunidad. Su caso, ha dicho el Ice, es ahora prioritario.
Aunque permanecía como irregular y tener dos delitos menores, Vizguerra había logrado permanecer en el país porque “su caso no era prioridad”.
Ahí entra la mujer, además es activista por los derechos migrantes y muy conocida en su comunidad. Su caso, ha dicho el Ice, es ahora prioritario.
