El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió a lanzar duros ataques contra su homólogo argentino, Javier Milei, llamándolo “malparido nazi fascista” y acusándolo de estar “pasando la motosierra” a los trabajadores de Argentina. Las declaraciones se hicieron durante un acto de campaña en el estado insular de Nueva Esparta, donde Maduro no escatimó en palabras para expresar su descontento.
“Yo en estos días dije y él se puso bravo (enojado), pero yo dije la verdad, ese Milei es un malparido nazi fascista, es un malparido que le está pasando la motosierra a los trabajadores, a las trabajadoras”, expresó Maduro, en referencia a las políticas laborales de Milei. Durante el acto, preguntó a sus seguidores si quieren que “pase en Venezuela lo que está pasando en Argentina” y que el país caribeño “se convierta en el desastre social de la Argentina de Milei”, a lo que los asistentes respondieron con un rotundo “no”.
El gobierno argentino, liderado por Milei, respondió a los ataques calificándolos de irrelevantes debido a que provienen de un “dictador” y un “imbécil”. En una rueda de prensa, el portavoz presidencial argentino, Manuel Adorni, desestimó las palabras de Maduro, afirmando: “Maduro es un personaje que se ha transformado, o siempre lo ha sido, en un dictador. Y las palabras de un dictador no ameritan un análisis porque vienen de una persona que tiene trastocados los valores éticos y morales y, por supuesto, está en contra de lo que nosotros defendemos y pregonamos, que es la democracia”.
Las relaciones entre Argentina y Venezuela, que fueron cercanas durante los mandatos de los peronistas Néstor Kirchner, Cristina Fernández y Alberto Fernández, se han deteriorado significativamente desde la llegada de Milei a la presidencia en diciembre pasado. Los constantes enfrentamientos y desacuerdos entre Milei y Maduro han profundizado la tensión diplomática entre ambos países.
Este nuevo episodio de insultos y reproches añade más leña al fuego en una relación ya de por sí conflictiva, evidenciando las profundas diferencias ideológicas y políticas entre los actuales gobiernos de Argentina y Venezuela.
Redacción/El Nacional