José Luis Garay/El Nacional
El esperado día llego y la guapa jovencita lo disfruto de la manera esperada. Acompañada de sus mejores amigos la quinceañera escuchó con atención el mensaje del párroco de la iglesia Nuestra señora de la soledad, dando gracias al creador por los dones y bendiciones recibidas.
Posteriormente Betty se traslado hasta una quinta, ubicada en el Municipio de General Escobedo Nuevo León, donde amigos y familiares la festejaron entre música, luces y diversión, lo que cristalizó en una noche inolvidable.