La Secretaría de Salud, ordenó a las funerarias no permitir el acceso a más de 10 u 8 personas a la vez a cada capilla, debido a que al ser lugares cerrados y muy concurridos, se convierte en uno de los principales riesgos de contagio por el COVID-19.

Como medida de prevención, las capillas de velación distanciaron un poco más de un metro uno de otro los asientos, áreas comunes, cafeterías y oratorios.

Además cuentan con gel antibacterial, guantes látex y cubrebocas, que son entregados por los encargados de los locales.

A fin de proteger a los menores, las autoridades sanitarias ordenaron también evitar el acceso a los niños

Los deudos pueden pasar en grupos de ocho o 10 personas en cada una de las capillas. De ser necesario las personas se turnan y esperan afuera la oportunidad para ingresar.

El encargado de un negocio del Centro de Monterrey comentó que la gente ha respondido, y ha sido consciente del riesgo que representa esta pandemia.

Redacción/ El Nacional